1.6.06

invierno de 42



volví a casa.
la encontré desordenada,
la maza donde no debía, polvo, eso.

la gata maullando todo el tiempo (me pregunté
si Baltasar había cumplido con su promesa
de venir a visitarla,
después me enteré que sí, pero a su manera,
un rayo veloz).
no se separaba de mí ni un minuto,
pegaba su hocico frío a mi nariz
y me acariciaba con sus uñas largas
el rostro avejentado del cansancio.
estoy en el último día de mis 42.
hizo frío en esta ciudad,
fui a comprar una alfombra.
amarilla. como el sol que entibia las ventanas
o como la casa de rosario.
y después compré un papiro,
y cuatro bambués, y otra enredadera roja,
aunque sin hojas.

limpié, comí y desanduve el viaje.

miro las fotos y recuerdo.
rosario, una ciudad bella,
llena de verjas bien cuidadas.

el bulevard oroño .
me lo caminé enterito,
trataba de descubrir dónde mi madre
se había despedido de su primer enamorado,
bulevard oroño, bulevard oroño,
mi memoria no me acompañaba más,
llamé a mi hermana, la memoriosa,
pero tampoco recordaba,
ya no quedaban testigos de esa hermosa historia,

sólo un bulevard, y sus verjas,
le pedí a mi madre que me mandara una señal,
y la ví, casi cuando empezaba a flaquear.

es esa, le dije a eduardo,
no sé que contestó él sobre el amarillo,
es esa, me dio una puntada en el corazón.

saqué una foto,
no sé a quién le sirve.

hoy hace frío, tanto que parece que fuera a nevar.
mi invierno de 42 ya acaba,
me voy a acostar,
quizá mañana sea un buen día.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

SEGURAMENTE LO SERA, Y OJALA QUE SALGA EL SOL! FELIZ CUMPLE

Anónimo dijo...

Di, no tengas dudas, hoy es un excelente día, FELIZ CUMPLE !!!!

Diana Laurencich dijo...

gracias pueblo!

Anónimo dijo...

Very pretty design! Keep up the good work. Thanks.
»

Diana Laurencich dijo...

who are you?
understand me?